q
DEPORTACIÓN A BABILONIA.
Pinceladas bíblicas.
En aquel tiempo, Nabucodonosor, rey de Babilonia, marchó contra Jerusalén y la ciudad quedó cercada. Entonces Jeconías, rey de Judá, se rindió al rey de Babilonia, él, su madre, sus cortesanos, jefes y eunucos. Deportó a todo Jerusalén, todos los jefes y guerreros, diez mil deportados, y todos los herreros y cerrajeros. No quedó más que la gente más pobre del país. Deportó a Babilonia a Jeconías y llevó al destierro, de Jerusalén a Babilonia, a la madre del rey y a las mujeres del rey, a sus eunucos y a los notables del país. (cfr.2 Reyes. 24, 10-16)
Ambientación histórica.-
Últimos años del Reino de Judá.
Entre los años 609 y 605 los Babilonios y los Egipcios estuvieron luchando por la zona situada al oeste del Éufrates. El rey Josías muere en batalla al intentar frenar al ejército egipcio. Joacaz, hijo de Josías, es nombrado rey.
Babilonia en el 605 vence al ejército Egipcio y se reparten la zona entre Medos y Babilonios. Los egipcios se retiran. Aún así logran mantener como vasallos a Siria y Palestina. El Faraón Necao depone a Joacaz y coloca a otro hijo de Josías Eliaquín quien cambia el nombre por Joaquín.
Nabucodonosor tiene que abandonar el campo de batalla por el fallecimiento de su Padre Nabopolasar en el año 605. A la vuelta, el reino de Judá se hace vasallo por tres años (604-602) de los babilonios.
1ª.- Primera Deportación. Año 597.
En el interin, el rey Joaquín se cambió de bando dando su apoyo, otra vez, a los Egipcios. Tal situación se demostró posteriormente un nuevo fracaso. Los babilonios en el año 600 a.c., vuelven para conquistar Jerusalén.
El verdadero ataque babilónico vendría en el invierno del 598. Al inicio del ataque murió Joaquín siendo reemplazado por su hijo Jeconías. Reinó tan solo tres meses. La ciudad se rindió el 16 de marzo del 597 a.c.
El Rey y toda la familia real junto con los altos oficiales, lo principal del ejército y los ciudadanos más importantes, fueron deportados a Babilonia, entre 8.000 ó 10.000 personas. El exilio del rey Jeconías, su corte y muchos otros se produce en el octavo año de Nabucodonosor. Primera diáspora. La “parte noble” del pueblo judío (entre ellos el profeta Daniel) se ve forzada a vivir en territorio imperial y bajo sus lineamientos.(2 Reyes 24, 12-16).
2ª.- Segunda Deportación. Año 587.
Sedecías se rebeló contra el rey de Babilonia. Al parecer tal evento ocurrió en el año 589. La reacción de Babilonia fue enviar a su ejército, el cual llego a Jerusalén en enero del 588/7. Los babilonios sitiaron la ciudad de Jerusalén.
El reino de Judá fue sometido por los babilónicos en el verano, julio probablemente. La tradición judía ubica ese hecho en el 9 de Av, es decir, en el día nueve del mes de Av del calendario judío. Todos coinciden en que la conquista fue realizada por el rey Nabucodonosor II cuando los babilonios rompieron los muros de la ciudad. Babilonia conquista Judá y su capital, Jerusalén. Aunque Sedecías logró huir, fue alcanzado y tomado preso, los babilonios mataron a los hijos de Sedecías en su presencia y después le arrancaron los ojos.
Un poco después el jefe de la guardia de Nabucodonosor, llegó a Jerusalén y, cumpliendo órdenes, incendió la ciudad y arrasó sus muros y destruyó el templo. Algunos de sus oficiales, eclesiásticos, militares y civiles y los ciudadanos principales, fueron llevados ante Nabucodonosor y ejecutados. Fueron deportados en el año décimo octavo de Nabucodonosor. A ello se refiere comúnmente la expresión Cautiverio de Babilonia. (2 Reyes: 25, 8-21); (Jeremías, 39, 8-10. 40, 7; 52, 12-34.).
3ª.- Tercera Deportación. Año 582.
Nabucodonosor colocó un gobernador, Godolías, en lo que aún quedaba de la población, pero al ser visto como colaboracionista de los babilonios, fue asesinado junto con su pequeña guardia. (2Reyes, 25, 22-25). Una tercera deportación, como castigo por el asesinato de Godolías, ocurrió en el 582. (Jeremías, 52,30.). Muchos otros consiguieron huir a Egipto, Siria, Mesopotamia, o Persia.
El exilio a Babilonia constituye la primera gran diáspora judía, pero los judíos no habían escrito sus últimas páginas en la historia. En Babilonia, los judíos permanecieron casi 50 años.