LOS DIOSES Y LAS DIOSAS.

Textos Bíblicos.

Libro del Génesis.

Capítulo: 31.
30 Así pues, tú te has marchado porque añorabas la casa paterna, pero ¿por qué robaste mis dioses?"
31 Respondió Jacob a Labán: "Es que tuve miedo, pensando que acaso ibas a quitarme a tus hijas. 32 Pero eso sí, que aquél a quien le encuentres tus dioses no quede con vida. Delante de nuestros parientes reconoce lo tuyo que esté en mi poder y llévatelo." En efecto, Jacob ignoraba que Raquel los había robado.
33 Entró Labán en la tienda de Jacob, en la de Lía y en la de las dos criadas, y no halló nada. Salió de la tienda de Lía, y entró en la de Raquel. 34 Pero Raquel había tomado los ídolos familiares y, poniéndolos en la albarda del camello, se había sentado encima. Labán registró toda la tienda sin hallar nada.
35 Ella dijo a su padre: "No le dé enojo a mi señor de que no pueda levantarme en tu presencia, porque estoy con la regla." Él siguió rebuscando por toda la tienda sin dar con los ídolos.

Libro del Éxodo.

Capítulo: 3.
13. Contestó Moisés a Dios: «Si voy a los israelitas y les digo: "El Dios de vuestros padres me ha enviado a vosotros"; y ellos me preguntan: "¿Cuál es su nombre?", ¿qué les responderé?»
14. Dijo Dios a Moisés: «Yo soy el que soy.» Y añadió: «Así dirás a los israelitas: "Yo soy" me ha enviado a vosotros.»

Capítulo: 12.
12. Esa noche yo pasaré por el país de Egipto y mataré a todos los primogénitos del país de Egipto, de los hombres y de los animales, y haré justicia con todos los dioses de Egipto. Yo, Yahvé.

Capítulo: 20.
3. No tendrás otros dioses fuera de mí.

Capítulo: 32.
1. Al ver el pueblo que Moisés tardaba en bajar del monte, se reunió en torno a Aarón y le dijo: «Anda, haznos un dios que vaya delante de nosotros, pues no sabemos qué ha sido de ese Moisés, que nos sacó del país de Egipto.»
2. Aarón les respondió: «Quitad de las orejas los pendientes de oro a vuestras mujeres, hijos e hijas, y traédmelos.»
3. Todo el pueblo se quitó los pendientes de oro de las orejas, y los entregó a Aarón. 4. Él los tomó de sus manos, los fundió en un molde e hizo un becerro de fundición. Entonces ellos exclamaron: «Éste es tu Dios, Israel, el que te ha sacado del país de Egipto.»
5. Al verlo Aarón, erigió un altar ante el becerro y anunció: «Mañana habrá fiesta en honor de Yahvé.» 6. Al día siguiente se levantaron de madrugada y ofrecieron holocaustos y presentaron sacrificios de comunión. El pueblo se sentó a comer y beber, y después se levantó para divertirse.

Libro del Deuteronomio.

Capítulo: 4.
35 A ti se te ha dado a ver todo esto, para que sepas que Yahvé es el Dios y que no hay otro fuera de él.

Capítulo: 6.
4. Escucha, Israel: Yahvé nuestro Dios es el único Yahvé. 5 Amarás a Yahvé tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas.

Capítulo: 7.
4. porque apartaría a tu hijo de mi seguimiento, y serviría a otros dioses; y la ira de Yahvé se encendería contra vosotros y se apresuraría a destruiros. 5. Por el contrario, esto es lo que haréis con ellos: demoleréis sus altares, romperéis sus estelas, arrancaréis sus cipos y prenderéis fuego a sus ídolos.

Capítulo: 10.
16. Circuncidad vuestro corazón y no endurezcáis más vuestra cerviz, 17. porque Yahvé vuestro Dios es el Dios de los dioses y el Señor de los señores, el Dios grande, fuerte y terrible, que no es parcial ni admite soborno;

Capítulo: 12.
2. Suprimiréis todos los lugares donde los pueblos que vais a desalojar han dado culto a sus dioses, en lo alto de los montes y en las colinas, y bajo todo árbol frondoso. 3. Demoleréis sus altares, romperéis sus estelas, quemaréis al fuego sus cipos, derribaréis las esculturas de sus dioses y suprimiréis su nombre de aquel lugar. [...]
30. guárdate de dejarte prender en el lazo siguiendo su ejemplo, después de haber sido ellas exterminadas ante ti, y de ir en busca de sus dioses, diciendo: «Como servían estas naciones a sus dioses, así lo haré yo también.» 31. No procederás así con Yahvé tu Dios. Porque todo lo que es una abominación para Yahvé, lo que él detesta, es lo que hacen ellos en honor de sus dioses: porque hasta a sus hijos y a sus hijas queman al fuego en honor de sus dioses.

Capítulo: 13.
2. Si surge en medio de ti un profeta o un vidente en sueños, y te ofrece una señal o un prodigio, 3. y llega a realizarse la señal o el prodigio que te ha anunciado, y te dice: «Vamos detrás de otros dioses (que tú no habías conocido) a servirles», 4. no escucharás las palabras de ese profeta o de ese vidente en sueños. Es que Yahvé vuestro Dios os pone a prueba para saber si verdaderamente amáis a Yahvé vuestro Dios con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma.

Capítulo: 16.
21. No plantarás para ti como cipo ninguna clase de árbol, junto al altar de Yahvé tú Dios que hayas construido para ti; 22. y no te erigirás estela, cosa que detesta Yahvé tú Dios.

Capítulo: 18.
9. Cuando hayas entrado en la tierra que Yahvé tu Dios te da, no aprenderás a cometer abominaciones como las de esas naciones. 10. No ha de haber dentro de ti nadie que haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, que practique la adivinación, la astrología, la hechicería o la magia, 11. ningún encantador, ni quien consulte espectros o adivinos, ni evocador de muertos. 12. Porque todo el que hace estas cosas es una abominación para Yahvé tu Dios y por causa de estas abominaciones desaloja Yahvé tu Dios a esas naciones a tu llegada.

Libro de Levítico.

Capítulo: 18.
21. «No darás ningún hijo tuyo para hacerlo pasar ante Mólec; no profanarás así el nombre de tu Dios. Yo, Yahvé. 22. «No te acostarás con varón como con mujer: es una abominación. 23. «No te unirás con bestia haciéndote impuro por causa de ella. La mujer no se prostituirá ante una bestia para unirse con ella: es una infamia. 24. «No os hagáis impuros con ninguna de estas prácticas, pues con ellas se han hecho impuras las naciones que yo voy a arrojar cuando lleguéis vosotros. 25. Se ha hecho impuro el país; por eso he castigado su iniquidad, y el país ha vomitado a sus habitantes.

Capítulo: 20.
1. Dijo Yahvé a Moisés: 2. «Dirás a los israelitas: Si un hombre cualquiera de entre los israelitas o de los forasteros que residen en Israel entrega uno de sus hijos a Mólec, morirá sin remedio; el pueblo de la tierra lo apedreará. 3. Yo mismo volveré mi rostro contra ese hombre y lo extirparé de su pueblo, por haber entregado un hijo suyo a Mólec, haciendo impuro mi santuario y profanando mi nombre santo. 4. Si el pueblo de la tierra cierra los ojos ante ese hombre que entregó uno de sus hijos a Mólec y no le da muerte, 5. yo mismo volveré mi rostro contra ese hombre y contra su familia, y lo extirparé de su pueblo, a él y a todos los que como él se prostituyan tras Mólec.
6. «Si alguien consulta a los nigromantes y a los adivinos, y se prostituye con ellos, yo volveré mi rostro contra él y lo extirparé de su pueblo.
7. Santificaos y sed santos; porque yo soy Yahvé, vuestro Dios.

Libro de Jueces.

Capítulo: 2.
11 Entonces los hijos de Israel hicieron lo que desagradaba a Yahvé. Dieron culto a los Baales. 12 Abandonaron a Yahvé, el Dios de sus padres, que los había sacado de la tierra de Egipto, y siguieron a otros dioses de los pueblos de alrededor; se postraron ante ellos, irritaron a Yahvé; 13 dejaron a Yahvé y dieron culto a Baal y a las Astartés.

Capítulo: 10.
6. Los israelitas volvieron a hacer lo que desagradaba a Yahvé. Dieron culto a los Baales y a las Astartés, a los dioses de Aram y Sidón, a los dioses de Moab, a los de los amonitas y de los filisteos. Abandonaron a Yahvé y ya no le servían.

Capítulo: 18.
11. Entonces los hijos de Israel hicieron lo que desagradaba a Yahvé. Dieron culto a los Baales. 12. Abandonaron a Yahvé, el Dios de sus padres, que los había sacado de la tierra de Egipto, y siguieron a otros dioses de los pueblos de alrededor; se postraron ante ellos, irritaron a Yahvé; 13. dejaron a Yahvé y dieron culto a Baal y a las Astartés.

Libro de Josué.

Capítulo: 9.
9. Le respondieron: «De muy lejana tierra vienen tus siervos, por la fama de Yahvé tu Dios, pues hemos oído hablar de él, de todo lo que ha hecho en Egipto 10. y de todo lo que ha hecho con los dos reyes amorreos del otro lado del Jordán, Sijón, rey de Jesbón y Og, rey de Basán, que vivía en Astarot.

Capítulo: 12.
4 Y Og, rey de Basán, un residuo de los refaítas, que residía en Astarot y en Edreí, 5 y dominaba en la montaña del Hermón y Salcá, y en todo el Basán hasta la frontera de los guesuritas y los maacatitas, y en la mitad de Galaad hasta la frontera de Sijón, rey de Jesbón.

Capítulo: 13.
12 Y en el Basán, todo el reino de Og, que había reinado en Astarot y en Edreí, y era el último residuo de los refaítas.

Capítulo: 24.
2 Josué dijo a todo el pueblo: «Esto dice Yahvé el Dios de Israel: Al otro lado del Río habitaban antaño vuestros padres, Téraj, padre de Abrahán y de Najor, y daban culto a otros dioses.

Libro de 1 Reyes.

Capítulo: 11
4. Al tiempo de su ancianidad, las mujeres de Salomón desviaron su corazón tras otros dioses, y su corazón no fue por entero de Yahvé su Dios, como el corazón de David, su padre. 5. Salomón marchaba tras Astarté, diosa de los sidonios, y tras Milcón, abominación de los amonitas. 6. Salomón hizo lo malo a los ojos de Yahvé, y no se mantuvo del todo al lado de Yahvé, como David su padre. 7. Por entonces Salomón edificó un altar a Camós, abominación de Moab, sobre el monte que está frente a Jerusalén, y a Milcón, abominación de los amonitas. 8. Lo mismo hizo con todas sus mujeres extranjeras que quemaban incienso y sacrificaban a sus dioses. [...]
33. porque me ha abandonado y se ha postrado ante Astarté, diosa de los sidonios, ante Camós, dios de Moab, y ante Milcón, dios de los amonitas, y no ha seguido mis caminos, haciendo lo que es justo a mis ojos, ni mis decretos ni mis sentencias como su padre David. [...] 57. (falta)

Capítulo: 12.
28. Tomó consejo el rey, hizo dos becerros de oro, y dijo al pueblo: «Basta ya de subir a Jerusalén. Éste es tu dios, Israel, el que te hizo subir de la tierra de Egipto.»
29. Instaló uno en Betel y el otro en Dan. 30. (Este hecho fue ocasión de pecado). El pueblo marchó delante de uno a Betel y delante del otro hasta Dan. 31. Construyó lugares de culto en los altos e instituyó sacerdotes del común del pueblo, que no eran descendientes de Leví. 32. Estableció Jeroboán una fiesta en el mes octavo, el día quince del mes, al modo de la fiesta de Judá. (Subió al altar que había edificado en Betel a ofrecer sacrificios a los becerros que había hecho. Estableció en Betel sacerdotes para los lugares de culto que había instituido). 33. Subió al altar que había edificado en Betel el día quince del octavo mes (el mes que ideó por su cuenta) e instituyó una fiesta para los israelitas, y subió al altar a ofrecer incienso.

Capítulo: 14.
15 Yahvé golpeará a Israel como se agita a una caña en las aguas; arrojará a Israel de esta tierra fecunda que dio a sus padres, y los dispersará al otro lado del Río, porque se hicieron sus estelas, irritando a Yahvé.

Capítulo: 18.
18. Él respondió: «No soy yo quien ha arruinado a Israel, sino tú y la casa de tu padre, por abandonar los mandatos de Yahvé y seguir a los Baales. 19. Pero ahora, haz un llamamiento y reúne en torno a mí a todo Israel en el monte Carmelo, y especialmente a los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal que comen a la mesa de Jezabel.»
20. Ajab hizo un llamamiento entre todos los israelitas y reunió a los profetas en el monte Carmelo. 21. Elías se acercó a todo el pueblo y dijo: «¿Hasta cuándo vais a estar cojeando sobre dos muletas? Si Yahvé es el Dios, seguidlo; si Baal lo es, seguid a Baal.» El pueblo no respondió palabra. 22. Elías les dijo: Quedo yo solo como profeta de Yahvé, mientras que los profetas de Baal son cuatrocientos cincuenta. [...]
25. Elías dijo a los profetas de Baal: «Elegid un novillo y preparadlo vosotros primero, pues sois más numerosos. Clamad invocando el nombre de vuestro dios, pero no pongáis fuego.» 26. Tomaron el novillo que les dieron, lo prepararon y estuvieron invocando el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía, diciendo: «¡ Baal, respóndenos!» Pero no hubo voz ni respuesta. Danzaban cojeando en torno al altar que habían hecho.
27. Al mediodía, Elías se puso a burlarse de ellos y decía: «¡Gritad con voz más fuerte, porque él es dios, pero tendrá algún negocio, le habrá ocurrido algo, estará de camino; tal vez esté dormido y despertará!»
28. Gritaron con voz más fuerte, haciéndose incisiones, según su costumbre, con cuchillos y lancetas hasta chorrear la sangre por sus cuerpos. 29. Pasado el mediodía, se pusieron a hacer el profeta hasta la hora de la presentación de la ofrenda, pero no hubo voz, no hubo quien escuchara ni quien respondiera. [...]
39. Todo el pueblo lo vio, cayeron rostro en tierra y exclamaron: «¡Yahvé, él es Dios; Yahvé, él es Dios!» 40- Elías les dijo: «Echad mano a los profetas de Baal, que no escape ni uno de ellos». Les echaron mano y Elías los hizo bajar al torrente de Quisón, y allí los degolló.

Libro de 2 Reyes.

Capítulo: 17.
7. Esto sucedió porque los israelitas habían pecado contra Yahvé, su Dios, que los había sacado de la tierra de Egipto, sustrayéndolos a la mano del faraón, rey de Egipto. Habían dado culto a otros dioses y 8. seguido las costumbres de las naciones que Yahvé había expulsado ante ellos. 9. Los israelitas cometieron acciones torcidas contra Yahvé su Dios: se edificaron altozanos en todas sus poblaciones, desde las atalayas de vigía hasta las ciudades amuralladas. 10. Se erigieron estelas y cipos sagrados sobre toda colina elevada y bajo todo árbol frondoso. 11. Allí quemaban incienso, en todo lugar de culto, al modo de los pueblos paganos que Yahvé había deportado ante ellos. Obraron mal, irritando a Yahvé, 12. y daban culto a los ídolos cuando Yahvé les había dicho: «No haréis tal cosa.» [...]
15. Despreciaron sus leyes y la alianza que había establecido con sus padres y las exigencias que les había impuesto. Caminaron tras dioses que eran nada y se volvieron nada, imitando a las naciones de alrededor, cuando Yahvé les había prescrito no actuar como ellas. 16. Abandonaron todos los mandamientos de Yahvé su Dios, y se hicieron ídolos fundidos, los dos becerros, y un cipo sagrado. Se postraron ante todo el ejército de los cielos y rindieron culto a Baal. 17. Arrojaron sus hijos e hijas a la pira de fuego, consultaron los augurios y practicaron la adivinación. Se prestaron por dinero a hacer lo malo a los ojos de Yahvé, hasta el punto de provocar su ira. [...]
29. Sin embargo, cada uno de aquellos pueblos paganos continuaba fabricando sus propios dioses y los instalaban en los altozanos que habían hecho los samaritanos; cada nación (los ponía) en las poblaciones que habitaba. 30. Las gentes de Babilonia hacían unos Sucot Benot, las de Cutá un Nergal, las de Jamat un Asimá, 31. los avitas un Nibjaz y un Tartac, y los sefarditas quemaban a sus hijos en honor de Adramélec y Anamélec, dioses de los sefarditas.
32. Daban culto también a Yahvé y se hicieron entre ellos sacerdotes de los altozanos, que oficiaban en los lugares de culto. 33. Daban culto a Yahvé y servían a la vez a sus dioses según las costumbres de las naciones de las que habían sido deportados. 34. Hasta el día de hoy han seguido practicando sus ritos antiguos.

Capítulo: 19.
17. Es verdad, Yahvé, los reyes de Asiria han exterminado las naciones, 18. han arrojado sus dioses al fuego y los han destruido, pero no eran dioses, sino hechuras de mano de hombre, de madera y de piedra.

Capítulo: 22.
17. Porque ellos me han abandonado y han quemado incienso a otros dioses irritándome con todos los ídolos que se han hecho. Arde mi ira contra este lugar y ya no se apagará.

Capítulo: 23.
4. El rey ordenó a Jilquías, al segundo de los sacerdotes y a los encargados del umbral que sacaran del santuario de Yahvé todos los objetos fabricados para Baal y Aserá y todo el ejército de los cielos. Los quemó fuera de Jerusalén en los yermos del Cedrón y llevó sus cenizas a Betel. 5. Suprimió los sacerdotes paganos que los reyes de Judá habían designado para quemar incienso en los altozanos, en las poblaciones de Judá y alrededores de Jerusalén, y los que ofrecían incienso a Baal, al sol, a la luna, a las constelaciones y a todo el ejército de los cielos. 6. Sacó la Aserá del templo de Yahvé fuera de Jerusalén, al torrente Cedrón, la quemó allí en el torrente Cedrón, la redujo a cenizas y esparció las cenizas sobre las tumbas del pueblo llano. 7. Derribó las dependencias de los consagrados a la prostitución que estaban en el templo de Yahvé, en el lugar en el que las mujeres tejían mantos para Aserá.
8. Hizo venir a todos los sacerdotes de las poblaciones de Judá y profanó los altozanos en los que los sacerdotes habían quemado incienso, desde Gueba hasta Berseba. Derribó los templetes de las puertas que estaban a la entrada de la puerta de Josué, gobernador de la ciudad, a la izquierda según se entra por la puerta de la ciudad. 9. Sin embargo, los sacerdotes de los altozanos no podían subir al altar de Yahvé en Jerusalén, pero comían los panes ázimos junto con sus hermanos.
10. Profanó el Tófet que había en el valle de Ben Hinón, para que nadie pudiera arrojar a su hijo o hija a la pira de fuego en honor de Mólec.
11. Retiró los caballos que los reyes de Judá habían dedicado al Sol, situados a la entrada del templo de Yahvé, cerca de la cámara del eunuco Natanmélec que había en las dependencias. Quemó el carro del Sol. 12. y derribó los altares construidos por los reyes de Judá que estaban sobre la azotea de la cámara superior de Ajaz, y los altares que edificó Manasés en los dos patios del templo de Yahvé. Los retiró, los destruyó allí y arrojó sus cenizas al torrente Cedrón.
13. El rey profanó también los altozanos que estaban frente a Jerusalén, al sur del Monte de los Olivos, que Salomón, rey de Israel, había construido a Astarté, abominación de los sidonios, a Camós, abominación de Moab, y a Milcón, abominación de los amonitas. 14. Deshizo las estelas y cortó los cipos sagrados, cubriendo sus lugares con huesos humanos.
15. También derribó el altar que había en Betel y el altozano que había levantado Jeroboán, hijo de Nebat, el que hizo incurrir en pecado a Israel. Quemó el altozano, rompió las piedras, las redujo a polvo, y quemó el cipo sagrado. [...]
19. Josías abolió también todos los santuarios de los altozanos en las poblaciones de Samaría que habían construido los reyes de Israel irritando con ello a Yahvé. Hizo con ellos exactamente como había hecho con Betel. 20. Inmoló sobre los altares a todos los sacerdotes de los altozanos que se encontraban allí y quemó sobre ellos huesos humanos. Luego se volvió a Jerusalén.

Libro de Crónicas.

Capítulo: 28.
2. Siguió los caminos de los reyes de Israel, llegando a fundir estatuas para los Baales. 3. Quemó incienso en el valle de Ben Hinón e incluso arrojó a su hijo a la pira de fuego, según la costumbre abominable de las naciones que Yahvé había expulsado ante los israelitas. 4. Ofreció sacrificios y quemó incienso en los altozanos, en las colinas y bajo todo árbol frondoso.

Salmos.

Salmo: 82.
6 Yo había dicho: «Vosotros sois dioses, todos vosotros, hijos del Altísimo».

Salmo: 106.
34 No exterminaron a los pueblos que Yahvé les había indicado; 35 se mezclaron con los paganos y aprendieron sus prácticas. 36 Adoraron a sus ídolos, que les sirvieron de trampa; 37 sacrificaron a sus hijos y a sus hijas a demonios. 38 Sangre inocente derramaban, la sangre de sus hijos y sus hijas, inmolados a los ídolos de Canaán, y profanaron el país con crímenes. 39 Se mancillaron con sus obras, se prostituyeron con sus prácticas.
40 Entonces se inflamó la cólera de Yahvé contra su pueblo y aborreció su heredad. 41 Los entregó en manos de los paganos, fueron dominados por los adversarios.

Libro 1 de Samuel.

Capítulo: 7.
3. Dijo entonces Samuel a toda la casa de Israel: «Si os volvéis a Yahvé con todo vuestro corazón, quitad de en medio de vosotros los dioses extraños y las Astartés, fijad vuestro corazón en Yahvé y servidle a él solo y entonces él os librará de la mano de los filisteos.»
4. Los israelitas quitaron los Baales y las Astartés y sirvieron sólo a Yahvé.

Libro de Isaías.

Capítulo: 17.
8. No se fijará en los altares, obras de sus manos, ni lo que hicieron sus dedos mirará: los cipos y las estelas solares.

Capítulo: 34.
14. Los gatos salvajes se juntarán con hienas y un sátiro llamará al otro; también allí reposará Lilit y en él encontrará descanso.

Capítulo: 42.
8 Yo, Yahvé, ése es mi nombre, mi gloria a otro no cedo, ni mi prez a los ídolos.

Capítulo: 43.
10. Vosotros sois mis testigos -oráculo de Yahvé- y mi siervo a quien elegí, para que me conozcáis y me creáis a mí mismo, y entendáis que yo soy: Antes de mí no fue formado otro dios, ni después de mí lo habrá. 11. Yo, yo soy Yahvé, y fuera de mí no hay salvador.

Capítulo: 45.
5. Yo soy Yahvé, no hay ningún otro; fuera de mí ningún dios existe. Yo te he ceñido, sin que tú me conozcas, 6. para que se sepa desde el sol levante hasta el poniente, que todo es nada fuera de mí. Yo soy Yahvé, no ningún otro; 7. yo modelo la luz y creo la tiniebla, yo hago la dicha y creo la desgracia, yo soy Yahvé, el que hago todo esto.

Capítulo: 57.
4. ¿De quién os burláis? ¿Por quién abrís la boca y sacáis la lengua? ¿No sois vosotros hijos de pecado, raza de bastardos, 5. los que entráis en celo en el encinar, bajo todo árbol lozano, los que degolláis niños en las torrenteras, bajo las hendiduras de las peñas? 6. ¡En los cantos de la torrentera hayas tu parte! ¡Ellas, ellos te toquen en suerte! También sobre ellos vertiste libación al presentar ofrenda. ¿Acaso con eso me voy a aplacar? 7. Sobre monte elevado y excelso pusiste tu lecho. También allá subiste a inmolar sacrificio. 8. A la puerta, en la jamba, pusiste tu anuncio. Sin mí te desnudaste, y abierto el lecho, subiste; tuviste trato con quienes te gustó acostarte, previo examen de la mano. 9. Te has acercado con aceite para Mélec, multiplicaste tus aromas. Enviaste a tus emisarios muy lejos, y los hiciste bajar hasta el Seol.

Libro de Jeremías.

Capítulo: 4.
4. Circuncidaos para Yahvé, extirpad los prepucios de vuestros corazones, hombres de Judá y habitantes de Jerusalén; no sea que brote como fuego mi saña, y arda, y no haya quien la apague en vista de vuestras obras perversas.

Capítulo: 7.
17. ¿Es que no ves lo que ellos hacen en las ciudades de Judá y por las calles de Jerusalén? 18. Los hijos recogen leña, los padres prenden fuego, las mujeres amasan para hacer tortas a la Reina de los Cielos, y se liba en honor de otros dioses para exasperarme. [...]
30. Los hijos de Judá han hecho lo que me parece mal -oráculo de Yahvé-: han puesto sus monstruos abominables en el templo que lleva mi Nombre profanándolo, 31. y han construido los altos de Tófet -que está en el valle de Ben Hinón- para quemar a sus hijos e hijas en el fuego, cosa que nos les mandé ni me pasó por las mientes.

Capítulo: 10.
2. Así dice Yahvé: Al proceder de los gentiles no os habituéis, ni de los signos celestes os espantéis. ¡Que se espanten de ellos los gentiles! 3. Porque las costumbres de los gentiles son vanidad: un madero del bosque, obra de manos del maestro que con el hacha lo cortó, 4. con plata y oro lo embellece, con clavos y a martillazos lo sujeta para que no se menee. 5. Son como espantajos de pepinar, que ni hablan. Tienen que ser transportados, porque no andan. No les tengáis miedo, que no hacen ni bien ni mal.

Capítulo: 19.
4. Porque me han dejado, han hecho extraño este lugar y han incensado en él a otros dioses que ni ellos ni sus padres conocían. Los reyes de Judá han llenado este lugar de sangre de inocentes, 5. y han construido los altos de Baal para quemar a sus hijos en el fuego, en holocausto a Baal, -lo que no les mandé ni les dije ni me pasó por las mientes-. 6. Por tanto, van a venir días -oráculo de Yahvé- en que no se hablará más de Tófet ni del valle de Ben Hinón, sino del "Valle de la Matanza".

Capítulo: 34.
34. sino que pusieron sus Monstruos abominables en el templo donde invocan mi Nombre, profanándolo, 35. y fraguaron los altos del Baal que hay en el Valle de Ben Hinón para hacer pasar por el fuego a sus hijos e hijas en honor de Mólec -lo que no les mandé ni me pasó por las mientes-, obrando semejante abominación con el fin de hacer pecar a Judá.

Capítulo: 44.
16 "En eso que nos has dicho en nombre de Yahvé, no te hacemos caso, 17 sino que cumpliremos precisamente cuanto tenemos prometido, que es quemar incienso a la Reina de los Cielos y hacerle libaciones, como venimos haciendo nosotros y nuestros padres, nuestros reyes y nuestros jefes en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén, que nos hartábamos de pan, éramos felices y ningún mal nos sucedía. 18 En cambio, desde que dejamos de quemar incienso a la Reina de los Cielos y de hacerle libaciones, carecemos de todo, y por la espada y el hambre somos acabados."
19 "Pues y cuando nosotras quemábamos incienso a la Reina de los Cielos y nos dedicábamos a hacerle libaciones, ¿acaso sin contar con nuestros maridos le hacíamos pasteles con su efigie derramando libaciones?"

Libro de Ezequiel.

Capítulo: 8.
9 Y me dijo: «Entra y contempla las execrables abominaciones que éstos cometen ahí.» 10. Entré y observé: toda clase de representaciones de reptiles y animales repugnantes, y todas las basuras de la casa de Israel estaban grabadas en la pared, todo alrededor.
11. Y setenta de los ancianos de la casa de Israel -uno de ellos era Jazanías, hijo de Safán-, estaban de pie delante de ellas cada uno con su incensario en la mano. Y el perfume de la nube de incienso subía.
12. Me dijo entonces: «¿Has visto, hijo de hombre, lo que hacen en la oscuridad los ancianos de la casa de Israel, cada uno en su estancia adornada de pinturas? Están diciendo: `Yahvé no nos ve, Yahvé ha abandonado el país.'»
13. Y me dijo: «Todavía les verás cometer mayores abominaciones.» 14. Me llevó a la puerta septentrional del templo de Yahvé; allí estaban sentadas las mujeres, plañiendo a Tamuz.
15. Me dijo: «¿Has visto, hijo de hombre? Todavía verás mayores abominaciones que éstas.» 16. Me condujo luego al atrio interior del templo de Yahvé; a la entrada del santuario de Yahvé, entre el vestíbulo y el altar, había unos veinticinco hombres de espaldas al santuario de Yahvé y de cara a oriente; se postraban en dirección a oriente hacia el sol.
17. Y me dijo: «¿Has visto, hijo de hombre? ¿No le basta a la casa de Judá con cometer las abominaciones que cometen aquí, para que llenen también el país de violencia, irritándome cada vez más? Mira cómo se llevan el ramo a la nariz. 18. Pues yo también voy a actuar con furor; no me apiadaré, ni perdonaré. Me gritarán con fuerza, pero yo no les escucharé.»

Capítulo: 11.
18. Vendrán y quitarán de ella todos sus ídolos y abominaciones; 19. yo les daré un solo corazón y pondré en ellos un espíritu nuevo: quitaré de su carne el corazón de piedra y les daré un corazón de carne, 20. para que caminen según mis preceptos, observen mis normas y las pongan en práctica, y así sean mi pueblo y yo sea su Dios.
21. En cuanto a aquellos cuyo corazón va en pos de sus ídolos y abominaciones, yo haré recaer su conducta sobre su cabeza, oráculo del Señor Yahvé.»

Capítulo: 36.
31. Entonces os acordaréis de vuestra mala conducta y de vuestras acciones que no eran buenas, y sentiréis asco de vosotros mismos por vuestras culpas y vuestras abominaciones. 32. No hago esto por vosotros -oráculo del Señor Yahvé-, sabedlo bien. Avergonzaos y confundíos de vuestra conducta, casa de Israel.

Libro de Daniel.

Capítulo: 14.
23. Había también un gran dragón al que los babilonios veneraban.
24. El rey dijo a Daniel: «No dirás que éste es también de bronce. Mira, está vivo, come y bebe. No puedes negar que es un dios vivo; así que adóralo.»
25. Daniel respondió: «Yo adoro al Señor mi Dios, que es el Dios vivo. Y si tú me das permiso, majestad, yo mataré a ese dragón sin espada ni palo.»
26. Y el rey le contestó: «Te lo doy.»
27. Entonces Daniel tomó pez, grasa y pelos; lo coció todo junto, hizo unas bolas y las echó en las fauces del dragón, que al comerlas reventó. Y Daniel dijo: «¡Mirad lo que adoráis!»
28. Cuando los babilonios se enteraron, se enfurecieron mucho y se amotinaron contra el rey, diciendo: «El rey se ha hecho judío: ha destruido a Bel, ha matado al dragón y ha degollado a los sacerdotes.»
29. Fueron, pues, a decir al rey: «Entréganos a Daniel; si no, te mataremos a ti y tu familia.» 30. Ante tan grandes amenazas, el rey se vio obligado a entregarles a Daniel.

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1.- Ambientación histórica.

¿QUIEN ES QUIEN?
Las Sagradas Escrituras hacen varias referencias de estas deidades identificándolas con nombres propios.

Ashera o Astarté.
http://es.answers.yahoo.com/question/index?qid=20090823045335AAxSSqK

La Diosa cananea de la Fertilidad.
Baal y Asera eran los dioses más importantes de la fertilidad. Su culto solía incluir actos sexuales con un sacerdote o una sacerdotisa, a los cuales se les debía entregar una ofrenda. Esto básicamente llegaba a ser una actividad sexual que se realizaba por dinero, razón por la cual la Biblia frecuentemente compara la veneración a estos dioses con la prostitución. El nombre común de esta diosa en Babilonia y Mesopotamia era Istar (que sobrevive en la actualidad bajo la forma Easter, nombre en inglés de la Pascua Florida). Su nombre entre las naciones que circundaban Israel era Asera o Astarté, pero los escritores bíblicos, aparentemente de manera deliberada, cambiaron el nombre a Astarot o Astoret para que su pronunciación se asemejara al vocablo hebreo que significa “vergüenza”. Efectivamente, el modo en que se la veneraba era degradante y vergonzoso. En Israel y en los países vecinos es común encontrar todavía estatuillas de esta y otras diosas de la fertilidad, claros indicios de la popularidad de su culto. La adoración a esta diosa es mencionada en el Antiguo Testamento a partir de la muerte de Josué en Jueces 2:13 (h. 1210 a.C.), hasta el reinado del rey Josías en 2 Reyes 23:13 (h. 640 a.C.).

Baal
http://www.wikicristiano.org/diccionario-biblico/941/baal/

Baal (dios semítico). El principal de todos que rivalizaba con Yahvé, era Baal que significa “Amo o Señor”, dios de los cananeos representado en forma de buey, y que fue sometido a la prueba del fuego por el profeta Elías en el monte Carmelo (1 Reyes 18,20-40).

Creían que los baales vivían en lugares o casas santas (como árboles, cumbres de montes y rocas, manantiales), y hablaban de cada uno de esos dioses locales como el Baal, el “señor”.

El AT los menciona a menudo, donde Baal aparece en su forma plural: baales (Jue. 2:11; 3:7; 8:33; etc.). Fueron considerados deidades naturales que cuidaban de la vegetación y del aumento de los rebaños y del ganado. Por lo general, cuando aparece en singular y con artículo, se refiere al principal dios nacional de los cananeos. Su enaltecimiento a la cabeza del panteón cananeo aparece en una época más bien tardía, puesto que El había tenido la preeminencia mucho tiempo antes y a Dagón se le había dedicado un templo antes de construirse uno para Baal. Pero cuando éste surgió como triunfador en la lucha por la supremacía entre los dioses, mantuvo esa posición por muchos siglos. Fue el dios de las tormentas. Como se le atribuían las tormentosas lluvias del invierno, se lo tenía por responsable de la fertilidad del país. Su hermana era la virgen Anat, la feroz diosa del derramamiento de sangre y la guerra, y su adversario era Mot, el dios de la sequía y del calor abrasador.

Cuando Baal fue asesinado. Anat le imploró a Mot que lo volviera a la vida. Pero cuando todos los esfuerzos de Mot fracasaron, se puso furiosa y en su ira lo venció y mató.

Entonces tomó a su hermano muerto y lo llevó al monte de los dioses, donde fue resucitado. Después de eso, los cananeos creían que la muerte y resurrección de Baal ocurrían anualmente, lo que daba como resultado las dos principales estaciones de Siria-Palestina: el verano y el invierno. La muerte de Baal a manos del malvado Mot al fin de cada estación lluviosa era recibida con amargo llanto y lamentos; y su resurrección anual, luego de los largos y secos meses del verano -cuando se iniciaba la estación lluviosa con nueva vida en los campos y las viñas-, era celebrada con fiestas alegres y licenciosas.

La adoración a Baal, universal en Siria y Palestina, tuvo gran atractivo para los israelitas. Repetidamente reincidieron en ella desde que entraron en la tierra de Canaán, hasta que fueron llevados en cautiverio. La 1ª vez que se menciona a Baal en la historia de Israel es poco después de la muerte de Moisés, cuando los hebreos acamparon en los campos de Moab, cerca de un lugar alto dedicado al dios (Nm 22:41). Fue adorado nuevamente en tiempos de los jueces (Jue. 2:13; 6:28-32) y frecuentemente en tiempos de los reyes de Judá e Israel. Casi sustituyó a Yahweh en el reino de Israel en los días de Acab, cuando Jezabel, la obstinada esposa fenicia del rey, intentó establecer la religión del dios como la única legal. Es bien conocida la historia de la lucha de Elías contra este culto y su enfrentamiento y desafío a los sacerdotes de Baal sobre el monte Carmelo (1 R. 16:31-33; 18:17-40). Pero esta victoria para Yahweh fue de corta duración. Inclusive el terrible aplastamiento de ese culto idolátrico por el rey Jehú al ascender al trono (2 R. 10:18-28) constituyó sólo una reforma temporaria.

En el reino de Judá, el culto a Baal fue introducido por Atalía, la malvada hija de Acab y Jezabel, y estimulado especialmente por Acaz quien hizo imágenes a los baales (2 Cr. 28:2). Estas fueron quitadas por su buen hijo Ezequías, pero los altares al dios fueron levantados nuevamente por Manasés, el siguiente rey (2 R. 21:3). A su vez, el buen rey Josías destruyó los utensilios que se habían usado en ese culto pagano (23:4, 5). La adoración a Baal fue una de las principales causas del cautiverio de Judá (Jer 19:5).

El AT también testimonia que su culto estaba acompañado con la práctica de sacrificar a los hijos en el fuego (Jer 32:35) y de besar su imagen (1 R. 19:18). Probablemente también estuvo acompañado por una grosera lascivia. Con frecuencia Baal está asociado con la diosa Astarot (Jue. 2:13), y en los lugares altos dedicados al dios a menudo se encontraba una imagen de Asera (Jue. 6:30; 1 R. 16:32, 33), su contraparte femenina.

Bel.
http://www.wikicristiano.org/diccionario-biblico/1044/bel/

Nombre popular de Marduk, el dios principal de los babilonios (Jer 50:2; 6:23-27). Originalmente Marduk no era más que un dios local de Babilonia, pero en tiempos de Hammurabi adquirió importancia cuando Babilonia llegó a ser la capital del imperio. Desde ese tiempo en adelante se lo consideró el principal de todos los dioses babilonios, sobrepasando en excelencia aun a su padre, Ea. También era el dios que otorgaba la autoridad a los soberanos de Babilonia, por lo tanto todos los reyes babilonios tomaban la mano de Bel (o Marduk) durante las festividades anuales de Año Nuevo, con lo que se confirmaba su soberanía para el año siguiente. El gran templo Esagila, en el centro de Babilonia, estaba dedicado a Bel-Marduk. En él había una estatua de oro del dios, al que se refieren textos antiguos de varias naciones. En Is 46:1 se mencionan juntos Bel y Nebo; Nebo, era el hijo de Bel. El castigo de Bel está predicho en Jer 51:44. Cabe destacar que en la sección apócrifa de Daniel (cap. 14) se detallan su culto (venerado como dios de cielos y tierra y de los destinos humanos) y su equiparación con una serpiente o dragón.

Marduk
http://religionesarcaicas.idoneos.com/index.php/Marduk

Marduk fue el dios babilónico probablemente más semejante al dios bíblico. (Jer 6:23-27). Hammurabi fue quien elevó a este dios a la primera categoría dentro del panteón babilónico. Marduk fue considerado como creador y señor del cielo y de la tierra y como quien determina el destino de los dioses y de los hombres. Su tempo, situado en Babilonia, templo de Esagila, tenía siete plantas, para algunos de la famosa torre de Babel. Por otra parte, Hammurabi, redactó el código por mandato del dios Shamash, lo cual tiene muchas semejanzas con la escena de Moisés, recibiendo la Ley de manos de Yahveh.

Serpiente.
http://www.miradaglobal.com/index.php?option=com_content&view=article&id=8:la-enigmatica-serpiente&catid=52:religion&Itemid=82&lang=es

Y una enorme serpiente que fue destruida por el profeta Daniel (14, 23-27):

Moloc. (Molk. Melek Môlek Molec Melec)
http://es.wikipedia.org/wiki/Tofet
http://www.wikicristiano.org/diccionario-biblico/3244/moloc/

Nombre de un dios a quien se ofrecían sacrificios humanos. No identificado. La ley mosaica prohibía terminantemente dedicar los hijos a Moloc. La práctica del sacrificio infantil fue prohibida por el rey Josías (2 R 23:10) y condenaba a muerte a quienes transgredieran esta ley (Lv 18:21; 20:1-5). También se menciona en Jeremías 32, 35 y en II Reyes, 23, 10.

Tofet es un lugar cercano a Jerusalén donde, según el Antiguo Testamento, los cananeos sacrificaban a niños al dios Moloc, quemándolos vivos. Se cree que es un lugar específico en el Valle de la Guehena. ”Y han edificado los lugares altos del Tofet, que está en el valle del hijo de Hinom, para quemar al fuego a sus hijos y a sus hijas, cosa que Yo (Yahvé) no les mandé, ni subió en mi corazón. Por tanto, he aquí vendrán días, ha dicho Yahvé, en que no se diga más Tofet, ni valle del hijo de Hinom, sino Valle de la Matanza; y serán enterrados en Tofet, por no haber lugar.” (Jeremías, 7, 31-32) El valle se convirtió en un vertedero donde se arrojaban animales muertos, basura y los cadáveres de los criminales ejecutados. Ardían hogueras permanentes para mantener alejadas las epidemias.

Sin embargo, los israelitas con frecuencia siguieron esta práctica (Jer. 7:31; 19:4, 5; 32:35; Ez. 16:21; 23:37, 39). Acaz y Manasés quemaron a sus hijos en el alto de Tofet, en el valle de Hinom, al sur de Jerusalén (2 Cr. 28:1, 3; 33:1, 6), pero el piadoso rey Josías destruyó este lugar para que no se lo pudiera usar más (2 R. 23:10).

Una declaración del profeta Amós (Am. 5:26) citada por Esteban (Hch. 7:43) parece indicar que los hebreos tuvieron alguna vez un santuario portátil dedicado a este dios. Al igual, que Moloc, dios de los amonitas con cabeza de toro y cuerpo de hombre (1 Reyes 11,7).

Dagon.
http://www.nosotros.cl/enigmas/detalle_noticia.php?cont=446

Deidad filistea. Ídolo de los filisteos con figura humana hasta la cintura, y terminando en forma de cuerpo de pez. Un dios en forma de pez. (1Samuel 5,4)

Esto también lo sugiere la Biblia cuando hablando del dios Dagón al que rindieron culto en el templo de Asdot (I Samuel 5, 1-7), de acuerdo con la interpretación más probable, tenía cara y manos, y una parte de su cuerpo era parecida a un pez, “el tronco de Dagón” (versículo 5).

Del texto recibido de los Setenta parecería que también tenía pies, aunque la edición Swete da a este punto una lectura diferente. En la traducción griega esta frase, se muestra con las características de tener un aspecto de brillo pulido.

La descripción de la Biblia coincide con la que puede verse en las monedas de varias ciudades, filisteas o fenicias, en la mayoría de ellas Dagón se representa como una figura compuesta, la parte superior del cuerpo es humana, y la inferior es de pez.

De ello parece deducirse que Dagón era un dios pez, hecho que no sorprende en lo más mínimo, puesto que parece haber sido la deidad principal de ciudades marítimas, tales como, Asdod, Gaza (los lugares originales se supone que están enterrados bajo las dunas de arena que corren a lo largo de la orilla), Ascalón, y Arvad. En los monumentos, y también probablemente en el culto popular, Dagón está asociado a veces con una deidad hembra también medio pez, Derceto o Atargatis, a menudo identificadas como Astarté.

Todos los estudiosos están de acuerdo que tanto el nombre como el culto de Dagón se importaron de Babilonia.

Las cartas de Tel el Amarna (aproximadamente 1480-1450 a. C.), dan testimonio de la antigüedad del culto a Dagón entre los habitantes de Palestina.

Sabemos por la Biblia que la deidad tenía templos en Gaza (Jueces, 16, 21, 23) y Asdod (I Samuel 5, 1-7); Suponemos que existieron estanques igualmente en otras ciudades filisteas. El culto a Dagón parece que se había extendido incluso más allá de los confines de su confederación. El testimonio de los monumentos es positivo para la ciudad fenicias de Arvad; más aun, el Libro de Josué menciona dos pueblos llamados Bét Dagón, uno en el territorio de Judá (Josué 15, 41), y el otro en la frontera de Aser (Josué 19, 27); Josefo también habla de un Dagón “más allá de Jericó” (Antiq. Jud., XIII, 8, 1; De Bel. Jud. I, 2, 3): todos estos nombres son anteriores a la conquista israelita, y, a menos que los derivemos de dagan, dan testimonio de a una amplia difusión del culto de Dagón a lo largo de Palestina. Este culto se mantuvo, por lo menos en ciertas ciudades filisteas, hasta los últimos siglos a. C. Este era el caso de Asdod; el templo de Dagón que estaba allí fue quemado por Judas Macabeo (l Mac.10, 84; 11, 4).

Al contrario de los Baales que, entre los cananitas, era deidades esencialmente locales, Dagón parece que era considerado por los filisteos como un dios nacional (I Crónicas 10, 10).

A él atribuyeron su éxito en la guerra; le dieron gracias con grandes sacrificios, ante él se regocijaron por la captura de Sansón (Jueces 16, 23); a su templo llevaron los trofeos de sus victorias, el Arca (I Samuel 5, 1, 2), la armadura, y la cabeza de Saúl (1 Samuel 31, 9, 10; I Crónicas 10, 10). Un semi relieve de bronce de trabajo asirio fenicio también sugeriría que Dagón tenía una función prominente en las doctrinas de la muerte y la vida futura. Acerca del ritual de su culto, poco puede recogerse o de los documentos o de la Escritura. Los acuerdos detallados para devolver el Arca (1 Samuel 5; 6) puede haber estado inspirado más por las circunstancias que por cualquier ceremonia del culto a Dagón.

Conocemos por los autores antiguos que, por razones religiosas, la mayoría de la gente siria se abstenía de comer pez, una práctica que uno se inclina relacionar con el culto de un dios pez.

El becerro de oro.

Construido por Aarón y los hebreos durante el éxodo (32,1-8). ¿Por qué hicieron un becerro? ¿Por qué no hicieron un león, oso o un antílope? ¿Por qué fue un becerro y no un toro o una vaca? Las respuestas se encuentran en el simbolismo religioso de las deidades veneradas. Estamos tratando con el simbolismo del dios-luna, quien era representado por los cuernos hacia arriba del becerro. Estos cuernos hacia arriba del becerro no se encuentran, por regla general, en los animales maduros y bien criados porque son seccionados. Se encuentran en el becerro y representan la luna creciente en el horizonte, así como aparece un período después de la verdadera fase de conjunción. Este creciente también se llevaba en las orejas y era un círculo redondo completo, que representaba al mismo tiempo el sol y la luna y la Estrella de la Mañana en su esplendor, como parte del sistema de tríada venerada en Egipto y en la Mesopotamia Norte, o lo que fue luego entendido como Sistema Babilónico. Ellos se levantaron temprano para saludar al sol naciente y también ofrecieron sacrificio.

Ellos se sentaron a comer y beber y se levantaron para regocijarse. Las palabras denotan las fiestas de culto de los sistemas paganos. La terminología era que esos dioses debían ir delante de nosotros. Este concepto era como un símbolo visible de la presencia divina, como en toda idolatría pagana. Por tanto, simbolizada por la conjunción de la luna nueva y la presencia visible del dios-luna observado como el creciente en el horizonte. Este concepto y la estrella del dios Remfan o Refan (Hechos 7:43) ha sido el factor mas persistente en idolatría Israelita por centurias y especialmente desde el cautiverio Babilónico, continuando hasta después de la formación de la iglesia del Nuevo Testamento. Aarón dijo Mañana será una fiesta a Dios. El trató de usar prácticas paganas para venerar a Dios. El simbolismo entorno a este sistema del becerro en Sinaí, desde Sin como progenitor, se enlaza con el primer y más primitivo sistema de sacrificio que empleaba también prostitución de culto y templo en un nivel muy extendido. Esta es la razón por la cual la jarana fue asociada con el Becerro de Oro. Por la invocación, Sin como dios-luna representado por el becerro, los tres aspectos o tríada de aspectos de él y su descendencia eran invocados. El becerro era también un símbolo de fertilidad en las religiones de la naturaleza del antiguo cercano-este. Estos símbolos fueron incorporados dentro de las fiestas de Israel por Jeroboam como dos becerros (cf. 1Kings 12:28; Hos. 8:5; fn. to Oxford Annotated Bible RSV, p. 109). (c. 1Reyes 12:28; Hos.8:5)

La adoración en el tabernáculo de Moloch o Chemosh, prevalecía en el tiempo del Éxodo, como vemos por el concejo de Balaam a los moabitas, de ponerle un obstáculo a los hijos de Israel.

Ambos, el Moloch con cabeza de becerro o Malcom y el Minotauro involucraban sacrificio humano. La similitud de la adoración del Minotauro de los cretenses con la de la práctica de los cartaginenses: Sugiere que la adoración asociada con los nombres de Minos y el Minotauro pudieron haber sido poderosamente influenciados por aquella de un Baal semítico (Frazer, Ibíd., p. 75).

El sistema fue establecido mientras Moisés estaba aparte con Dios. De la misma manera, el sistema es pervertido en la ausencia del Mesías.

Éxodo 32:7-10 7 Entonces Jehová dijo a Moisés: Anda, desciende porque tu pueblo que sacaste de tierra de Egipto se ha corrompido; 8 Presto se han apartado del camino que yo les mandé, y se han hecho un becerro de fundición, y lo han adorado, y han sacrificado a él, y han dicho: Israel, estos son tus dioses, que te sacaron de la tierra de Egipto. 9 Dijo mas Jehová a Moisés : Yo he visto á este pueblo, que por cierto es pueblo de dura cerviz: 10 Ahora pues, déjame que se encienda mi furor en ellos y los consuma: y á ti yo te pondré sobre gran gente.”(AVRV)

Israel era un pueblo obstinado que no dejaría su subestructura de idolatría. Ellos entrelazaron el sistema de fertilidad y la adoración a la luna con la estructura misma de su simbolismo religioso hasta el punto de ser atrapados por este, aún hoy en día como veremos. Por lo tanto, el simbolismo usado en Sinaí era tanto egipcio como mesopotámico y relacionado con el Becerro de Oro, el cual era el símbolo del dios-luna. Este dios-luna Sin fue la causa de que Israel vagara en el desierto de Sin por cuarenta años. La identificación del toro o Becerro de Oro con Moloch, viene de la práctica de los cartaginenses y probablemente de todo el mundo púnico de sacrificar sus niños a Moloch o Malcom colocándolos en los brazos de la estatua de bronce de la bestia que tenía la cabeza de un toro becerro (i.e. con cuernos como una creciente). Los niños rodaban hacia el fuego en frente y eran matados. Esto puede ser similar a la tradición del Minotauro en Creta (Frazer, Ibíd., iv, p. 75). De ahí, el tabernáculo de Moloch puede ser identificado con el becerro de Sin en Sinaí.

Milcom / Milcon

Otro ídolo de los amonitas.
Pero en otros pasajes el dios de los amonitas es llamado Milcom, no Moloch (Libro de los Reyes 1 - 11.33, y Sofonías 1,5). La Septuaginta lo llama Milcom en Reyes 1 - 11.7 en vez de Moloch, aunque esto sugiere un posible error en la transcripción del hebreo. Como consecuencia, muchas traducciones inglesas lo denominan Milcom.

Quemos / Camós

dios de Moab (1 Reyes 11, 57), Su religión era politeísta, y su dios principal, Quemos (Jer 48:13), cuyo nombre aparece en la Piedra Moabita (líneas 3, 5, 9, etc.).

Diosa reina del cielo

en Egipto (Jeremías 44, 16-19),

Refán

la estrella del dios Refán (Hechos 7,43),

2 R, 17, 29-34 30 Las gentes de Babilonia hacían unos Sucot Benot, las de Cutá un Nergal, las de Jamat un Asimá, 31 los avitas un Nibjaz y un Tartac, y los sefarditas quemaban a sus hijos en honor de Adramélec y Anamélec, dioses de los sefarditas.

Sucot Benot

http://www.wikicristiano.org/diccionario-biblico/4258/sucot-benot/

Ídolo erigido en la provincia de Samaria por colonos babilonios (2 R. 17:30); no ha sido identificado con certeza. Rawlinson, Schrader y Sanda creen que se trata de una forma corrupta de Tsarpanitu, una diosa de Babilonia, esposa de Marduk o, de acuerdo con Friedrich Delitzsch, sería sakkuth bimûti, “el juez del universo”, uno de los títulos de Marduk, el principal dios de Babilonia. Recientemente se ha encontrado la 2ª parte de este nombre en algunos papiros arameos de Hermópolis Oeste, con la grafía Bnt, lo que sería el nombre de una deidad de Syene.

Nergal
http://es.wikipedia.org/wiki/Nergal

Nergal (o Nirgal) es el laivo sumerio-babilonio del grasomundo y señor de los muertos, siendo considerado como el aspecto siniestro del dios del sol Utu. Gobierna el inframundo junto a su consorte, Ereshkigal. Aparece como hijo de Enlil y Ninlil, y según la leyenda, fue engendrado cuando Enlil fue confinado a pasar una temporada en el inframundo por violar a Ninlil. Cuando Ninlil va a preguntar por Enlil (a la ciudad del inframundo), este se hace pasar por el portero, le lleva a una habitación le hace el amor y engendran a Nergal Meslamstea. El hecho de ser un dios del desierto y del fuego, aspectos negativos del sol, y del inframundo, así como el pertenecer al panteón ha provocado que, desde que aparece la religion judía, con frecuencia haya sido incluido dentro de la lista de demonios de dichas religiones, llegándosele incluso a identificar con Satán. Algunos estudiosos y demonólogos medievales, como Collin de Plancy y Johann Weyer consideran a Nergal como el jefe de la policía secreta del infierno, indicado que es un espía a las órdenes de Agliareth, que es el demonio de los secretos.

Asima

Diccionario biblico: Asima
http://www.wikicristiano.org/diccionario-biblico/861/asima/

Dios de Hamat, introducido en Samaria por los colonos asirios (2 R. 17:30) al ser trasplantados al antiguo territorio de Israel por Sargón II. En inscripciones griegas hay referencias a un dios sirio Semios y a una diosa siria Sima o Smea. En un papiro arameo de la colonia judía de Elefantina aparece un dios shmbyt*l, que se puede pronunciar Ashim bethel.

Nibhaz
http://www.wikicristiano.org/diccionario-biblico/3369/nibhaz/

Dios de los aveos, gente establecida por los asirios en el territorio de Samaria, después que las 10 tribus fueron llevadas en cautiverio (2 R. 17:31). Las sugerencias para identificar a Nibhaz con alguno de los dioses conocidos no son concluyentes.

Tartac
http://www.wikicristiano.org/diccionario-biblico/4329/tartac/

Dios de los aveos, desconocido por parte de otras fuentes, adorado en Samaria (2 R. 17:31). Es posible que se trate de la modificación de Atargatis, el nombre de una diosa ampliamente adorada por los arameos de Siria y Mesopotamia.

Adramelec
http://www.wikicristiano.org/diccionario-biblico/619/adramelec/

1. Dios introducido en Samaria por los colonos traídos de Sefarvaim y a quienes Sargón trasplantó del norte de la Mesopotamia a Palestina después de la caída de Samaria. Se sacrificaban niños en el fuego a este dios (2 R. 17:31). Los registros cuneiformes de Tell 2alâf, en la Mesopotamia del norte, mencionan a este dios por nombre: Adad-milki.

Anamelec
http://laverdadderestauracion.blogspot.com/2008/06/anamelec.html

Anamelec Deidad que, junto con Adramelec, era adorada por los colonos de Sefarvaim ubicados en Samaria por los asirios (2 R. 17.31).

Lilit.

Tamuz.

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2.- Historia de la Salvación.

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Literatura extra bíblica.

Dioses mesopotámicos: Lilith.

Dioses egipcios:

Dioses cananeos: Baal; Asera o Astarté;

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Bibliografía. Enlaces: www.

Monoteísmo bíblico y africano. Aprendizaje total.
Ritos y mitos. La creación. Aprendizaje total.
Mitos. Veghazi. Página judía.
Ídolos e imágenes sagradas. Aciprensa.
Los tres pensamientos básicos del Antiguo Testamento. H. Halley. Adventista.
Yahvé, padre de Israel. Mercaba.
Verdades de la fe católica. Apologética. Guido Adolfo Rojas Zamorano.
El Señor nuestro Dios, el Señor uno es. Comunión de gracia. Evangélicos.
Historia de las religiones en la antigüedad. Uib.es. Programa de curso.
Religiosidad de los antiguos semitas. Slideshare.net. Sólo lectura.
El origen de Dios. Lapizarradeyuri.blogspot.com

Los dioses y diosas:
Libre.
El antiguo y nuevo dios Moloc. Forumlibertas.
Moloc. Wikicristiano.
El dios Dagón. Enigmas.
¿Quién es la diosa Ashera? Answers.
Baal. Wikicristiano.
Bel. Wikicristiano.
Marduk. Religiones arcaicas.
El becerro de oro. Ccg.org. Iglesias cristianas de Dios.
Divinidades paganas. Galeón.
La Diosa Asherá en el antiguo Israel. J. Severino Croatto.
¿Sabían que la esposa de Yahvé es la diosa Ashera? Answers.
Cultura y civilizaciones antiguas. Luis Heinecke Scott.
Diccionario bíblico.

Egipto:
La arqueología y los Patriarcas. Charles Pope.
El culto del dios Sol y la religión monoteísta de Akenatón.
A la diosa madre. Karlheinz Deschner.
Ishtar/Astarté y Baal. Gran diosa, pareja divina. Javier Pikaza.
Astarot.
El culto a Baal.

Actualizado: 1-Enero-2.014.