GENEROS LITERARIOS y/o FORMAS LITERARIAS.
Textos bíblicos.
Libro del Génesis 11, 1-19
La torre de Babel.
La alianza de Abraham con Abimalec.
El sacrificio de Isaac.
Libro del Éxodo 17, 1-7
El agua brotada de la piedra.
Libro de Números 22, 20-35
El encuentro de Balaán con el Ángel del Señor.
Libro del Deuteronomio 5, 6-21; 32, 1-43
La promulgación del Decálogo.
El canto de Moisés.
Libro de Josué 5, 2-9
La Circuncisión de los Israelitas en Guilgal.
Libro de los Jueces 5, 1-31; 7, 13; 9, 8-15
El canto de Débora y Barac.
Cuando llegó Gedeón, oyó que un hombre le estaba contando un sueño a su compañero. “Tuve un sueño, le decía; vi que una galleta de cebada venía rodando por el campamento de Madián. Al llegar a una carpa, chocó contra ella y la volteó, de manera que la carpa cayó por tierra”.
Su compañero le respondió: “Esto no significa otra cosa que la espada de Gedeón, hijo de Joás, el hombre de Israel. Dios ha puesto en sus manos a Madián y todo su campamento”.
La fábula de Jotám.
Libro de 2 Samuel 1, 19-27
Lamentación de David por la muerte de Saúl y Jonatán.
Libro de 1 Reyes 3, 4-15
El sueño y la súplica de Salomón en Gabaón.
Libro de 2 Ryes 14, 9
“Pero Joás, rey de Israel, mandó a decir a Amasías, rey de Judá: “El cardo del Líbano mandó a decir al cedro del Líbano: Dale tu hija por esposa a mi hijo. Pero un animal salvaje del Líbano pasó y pisoteó el cardo.”
Libro de Nehemías 1, 4-11
La oración de Nehemías.
Libro de Job 38, 10-11
“Yo tracé un límite alrededor de él, le puse cerrojos y puertas, y le dije: “Llegarás hasta aquí y no pasarás; aquí se quebrará la soberbia de tus olas”.
Libro de 1 Macabeos 8, 22-32
La alianza de los judíos con los romanos.
Libro del Eclesiastés 7, 5
Subversión de los valores tradicionales.
Libro de Isaías 6, 1-13: 7, 18-25; 23, 15-16
La vocación de Isaías.
La invasión devastadora.
Aquel día, Tiro será olvidada durante setenta años, que es la duración de la vida de un rey. Al cabo de setenta años, a Tiro le sucederá como en la canción de la prostituta: “¡Toma la cítara, recorre la ciudad, prostituta olvidada! Toca bien, canta mucho, para que se acuerden de ti”.
Libro de Zacarías 14, 1-21
El combate final y el esplendor de Jerusalén.
Libro de los Salmos 6; 13; 18; 103; 109
Súplica de un enfermo grave.
Súplica en una situación angustiosa.
Profesión de confianza en Dios.
La misericordia del Señor con sus fieles.
Lamentación del justo en la persecución.
1.- Historia.
Los dos términos, “género literario” y “forma literaria” en la práctica son casi sinónimos.
Género literario es un término más extenso, y se puede aplicar al carácter literario de todo un libro o un conjunto de libros; así, se podría hablar de “género profético”, “género sapiencial”, etc.
Forma literaria quedaría para el carácter literario de una unidad literaria menor, como podría ser un “himno”, o una “parábola”.
Entendemos, pues, por género literario “Un procedimiento de expresión propio de los hombres de una determinada época y un determinado país o entorno cultural para manifestar sus pensamientos y sentimientos”.
¿Cómo se determina un género literario?
Por medio de la crítica literaria, que se ocupa de:
-Establecer las unidades literarias que componen un texto;
-Determinar cómo están relacionados los distintos elementos de un texto;
-Sentar una hipótesis sobre la historia de la composición del texto, atendiendo a las “huellas” que la historia de la composición del texto ha dejado dentro del mismo texto: duplicados, incoherencias internas, etc.
Dentro de la crítica literaria se pueden distinguir varios métodos que responden a quehaceres distintos:
* Crítica de los géneros literarios, llamada también “Historia de las formas”: se ocupa de identificar los géneros literarios, determinar su estructura y los recursos estilísticos que emplea, y dilucidar cómo y cuándo pudo haber nacido ese género, y cómo ha podido evolucionar.
* Crítica de las tradiciones llamada también “Historia de la tradición”: se ocupa de identificar las principales ideas (=tradiciones) del pensamiento del autor, e intentar determinar cómo nacieron esas ideas y cuál fue su desarrollo.
* Crítica de la redacción, llamada también “Crítica de la composición” o “Historia de la redacción”: se ocupa de identificar cuál ha sido el trabajo del redactor o editor último del libro, cuál es el vocabulario propio de ese redactor, sus recursos estilísticos (lo que se llaman “elementos redaccionales”, para distinguirlos de los “elementos tradicionales”, y a partir de todos estos elementos intentar reconstruir cuál ha sido el pensamiento del redactor final (la “teología del redactor”).
* La crítica literaria se completa con la crítica histórica, (o “método histórico-crítico”), que se ocupa de precisar el alcance histórico de los textos que pertenecen a un género literario “histórico” o “historiográfico”, o que están en relación con la historia.
2.- Géneros literarios en la Biblia.
En la Biblia hay muchos Géneros Literarios, o sea, maneras especiales de decir las cosas y de narrar los acontecimientos.
Y es muy importante conocer en qué género literario está escrito un pasaje de la Biblia, para entender qué es lo que allí el autor quiere decir y significar.
Se pueden clasificar de diversas maneras, tales como:
Histórico:
- Los libros históricos tienen su clásico lenguaje narrativo: conciso, lineal, con largas digresiones y, a veces, reducido a listas de nombres. Tiene forma de relato, real o imaginario.
- Incluye narraciones populares, leyendas, sagas, cuentos… Relatos y crónicas de hechos ocurridos y acontecimientos cotidianos registrados por escrito, anales crónicas, discursos,… Se trata de narraciones aleccionadoras y programáticas que muestran lo que hay que hacer en cada momento.
- Los historiadores bíblicos, según los criterios de sus tiempos, procuraron transmitirnos más que una detallada narración de los hechos históricos, las enseñanzas provenientes de los mismos.
- Tiene un fin religioso, destaca la presencia de Dios en la historia.
- Libros de la biblia que se pueden considerar en su conjunto como históricos: Génesis, Deuteronomio, Crónicas, Esdrás, Nehemías, 1 y 2 Reyes, etc.
Legislativo:
- Textos que recogen normas o costumbres por las que se regía el pueblo. El decálogo y el código de la Alianza son representativos de géneros legislativos.
- La LEY es una exigencia de la Alianza con Dios.
- Son libros legislativos: Éxodo, Deuteronomio, Levítico.
Profético:
- Revela la existencia de un “mensajero” que habla a los hombres en nombre de Dios.
- El profeta se vale de la acción simbólica, de la denuncia, anuncio, aviso, amenaza, visiones, oráculos, confesiones…
- Los libros proféticos tienen su peculiar lenguaje simbólico: elocuente, patético, recio, visionario. Los profetas, muchos de ellos, hasta con sus vidas son acciones proféticas.
Lírico cultuales:
- Expresa sentimientos, vivencias internas, pasión, amor…
- Su lenguaje tiende al simbolismo, que expresa mejor las vivencias íntimas del acontecimiento poético y religioso. Encontramos piezas verdaderamente clásicas como salmos, himnos, súplicas, acciones de gracias…
Libros bíblicos: Salmos, Cantar de los Cantares, Lamentaciones…
Sapiencial:
- Se suele referir a las narraciones y sentencias de experiencias de vida. Sabios y pensadores reflexionan sobre diversas realidades de la vida y sobre los grandes interrogantes del hombre.
- Los libros didácticos tienen un lenguaje doctrinal: sentencioso, claro, directo, popular y con frecuencia poético. No es desconocido tampoco muchos dichos recogidos de la tradición, adivinanzas, enigmas, refranes, proverbios, poemas.
Son libros sapienciales: Proverbios, Job, Eclesiastés, Sabiduría.
Epistolar:
- Escritos enviados por un remitente a un destinatario.
- Contenido variado: Jeremías (cartas proféticas), 1 Reyes (cartas reales), Hebreos (cartas temáticas), Filipenses (cartas de acción apostólica).
Apocalíptico:
- Relato de revelaciones obtenidas mediante visiones y sueños, expresados de forma enigmática y simbólica. Descubre lo que va a suceder, con simbología e imágenes sorprendentes, abundan las visiones simbólicas, las alegorías enigmáticas y las especulaciones numéricas. Al final, el bien triunfará sobre el mal.
- Género literario usado tanto en el AT como en el NT.
- El Apocalipsis de Juan fue escrito en respuesta a una situación muy especial que vivía la comunidad cristiana. - No tiene un mensaje de predicción del fin del mundo ni nada por el estilo, sino que quiere ser un mensaje de esperanza para una comunidad cristiana que estaba viviendo la persecución, donde el peligro más grande era que ante esta situación tan desesperante abandonaran la fe.
- Libros especialmente apocalípticos: Daniel, Zacarías, Apocalipsis.
3.- Literatura extra bíblica.
Historia de las Formas.
Una nueva orientación en el estudio de la biblia ha surgido con la denominada Historia de las Formas.
Más que un método exegético se entiende una escuela exegética que estudia las formas literarias de la Biblia y que comenzó a desarrollarse en el ámbito protestante a partir de 1.900 con el descubrimiento de nuevos textos de literaturas elaboradas en zonas cercanas al ámbito judío: Babilonia, Asiria, Egipto, Canaán, etc.
Se trata de descubrir dentro de cada documento las formas literarias previas, y establecer cuál había sido la historia de las mismas hasta quedar incorporadas en cada uno de los documentos clásicos.
Más importante que el estudio de los documentos largos era la comprensión de las unidades literarias previas (relatos populares, poemas, leyendas, etc.), procurando determinar la situación ambiental (Sitz im Leben) del Israel que dio lugar a cada una de ellas, los géneros literarios comunes a la literatura extrabíblica y la finalidad teológica última de cada unidad menor.
La expresión «historia de las formas» fue extendida por su principal promotor, el teólogo protestante Martin Dibelius.
La metodología que usa en la investigación se realiza comparando los textos de la Biblia con los de las literaturas de culturas contemporáneas a ella, pero también comparando textos de la misma Biblia entre sí (sobre todo si se trata de textos de elaborados en diversos períodos históricos).
Por tanto, para apoyar el estudio de las formas se requiere un profundo conocimiento de las culturas del período «bíblico».
La investigación sobre los “géneros literarios” y sobre la “historia de las formas” son dos disciplinas íntimamente unidas entre sí.
La Pontificia Comisión Bíblica de la Iglesia católica publicó en el año 1964 una instrucción en la que anima a los teólogos católicos a usar esta metodología pero con cautela, dados los presupuestos filosóficos o teológicos que no pueden admitirse pues en su conjunto adolecen de falta de fe o retiran totalmente el elemento sobrenatural.
4.- Distinguir el género literario.
Pero para entender el mensaje de Dios en la Biblia no basta con conocer las circunstancias históricas.
Es necesario además, entre otras muchas cosas, saber distinguir el género literario en que fue escrita cada parte de la Biblia.
No es lo mismo leer un libro de poesías, que de historia o una novela, una obra de teatro, una carta o un código de leyes. Ante cada uno tomamos una actitud diferente.
Sería un grave error leer una novela tomándola al pie de la letra, como si fuera una historia realmente sucedida; y tomaríamos por loco al que quisiera considerar como leyes civiles los entusiasmos románticos de unas poesías de amor.
Así, el enamorado se dirige a la enamorada de muy distinta forma a la de un periodista que da una información, o a la forma cómo un médico escribe una receta.
Sería necio quien interpretase todos los lenguajes de la misma forma.
En el caso de un científico, por ejemplo, es enorme la diferencia entre escribir un artículo para una revista científica o para un diccionario de divulgación o para una página de periódico.
Cada forma literaria tiene su modo especial de presentar la realidad.
Por ello el lector aborda los libros con distinta expectación, según la forma literaria en que están escritos.
Una novela romántica se lee con una expectación distinta a como se lee un libro de historia, porque cada forma de lenguaje aborda, a su modo, la realidad.
Nadie espera que los personajes de la novela hayan vivido realmente; o si se trata de una novela histórica, que los personajes hayan dicho y hecho en realidad cuanto dicen y hacen en la novela.
Nuestras esperanzas son distintas ante una colección de refranes, una leyenda épica, un cuento o un serial radiofónico. Unas y otras son formas literarias de captar y expresar la realidad, pero cada cual a su modo.
Generos literarios en la Biblia.
Pues este error y esta locura la cometemos con frecuencia cuando leemos la Biblia como si todo estuviera escrito en la misma clase de género literario. Uno es el lenguaje expresado en un libro de profecías y otro distinto el que usa un libro de leyes como el Levítico. Si se trata de un libro de género poético, como los Salmos, no podemos tomar sus palabras del mismo modo que las de una carta de San Pablo.
Todo lo dicho vale, como es natural, para la Biblia, como para cualquier obra escrita. La dificultad está en que, como la Biblia se escribió durante mucho tiempo y hace siglos, las circunstancias y las formas de lenguaje han cambiado tanto que a veces nos resultan poco familiares.
En la historia de la Iglesia ha habido enormes confusiones y han estallado amargas discusiones por el mero hecho de no haberse dado cuenta de la intención fundamental de ciertos géneros y formas literarias. Se tomaron como noticias históricas textos bíblicos que pretendían simplemente predicar, anunciar un mensaje; o se tomaron como leyes textos del Nuevo Testamento que no era más que exhortaciones. Se vieron como historias reales narraciones noveladas. Se quiso tomar todo al pie de la letra, hasta los temas de carácter científico, costumbrista o cultural.
Hoy en día, sobre todo a partir de Pío XII, se tiene en la Iglesia un especial cuidado en distinguir los diversos géneros literarios de la Biblia.
Dice este Papa en su encíclica “Divino Afflante Spiritu”:
“El intérprete debe trasladarse con el pensamiento a aquellos tiempos del Oriente, y con la ayuda de la historia, de la arqueología, la etnología y otras ciencias, examinar y distinguir claramente qué géneros literarios quisieron usar y usaron de hecho los escritores de aquellas épocas remotas.
…Ninguno de los modos de hablar de los que entre los antiguos, y especialmente entre los orientales, se servía el lenguaje para expresar el pensamiento, puede decirse que es incompatible con los Libros Sagrados.
…En la Escritura las cosas divinas son presentadas, según el uso de su tiempo, de un modo humano.
…Conociendo, pues, y evaluando debidamente los modos y el arte de hablar y escribir de los antiguos, se podrán resolver muchas objeciones que se hacen contra la verdad y el valor histórico de las Sagradas Escrituras; además de que este estudio ayudará mucho a una más completa y luminosa comprensión del pensamiento del autor sagrado.”
Más tarde el Concilio Vaticano II afirmó con claridad:
“Para descubrir la intención del autor, hay que tener en cuenta, entre otras cosas, los géneros literarios. Pues la verdad se presenta y se enuncia de modo diverso en obras de diversa índole histórica, en libros proféticos, o en otros géneros literarios. El intérprete indagará lo que el autor sagrado dice e intenta decir, según su tiempo y cultura, por medio de los géneros literarios propios de su época. Para comprender exactamente lo que el autor propone en sus escritos, hay que tener muy en cuenta los modos de pensar, de expresarse, de narrar, que se usaban en tiempos del escritor, y también las expresiones que entonces más se solían emplear en la conversación ordinaria” (Dei Verbum, 12).
Los siglos pasados no supieron ver la riqueza y el colorido de las formas literarias de la Biblia. No se hablaba sino de tres géneros: los libros históricos, los proféticos y los didácticos. Este reparto superficial y mecánico hizo que Tobías fuera metido entre los libros históricos, Jonás entre los proféticos y los Salmos entre los didácticos. Y lo que es peor, los llamados libros históricos acapararon la atención, de forma que toda la Biblia muchas veces fue aprisionada y reducida a historia sagrada.
En realidad cada libro tiene su género literario, y dentro de cada uno suele haber diversas formas literarias. La exégesis moderna distingue en la Biblia el relato histórico, la saga, el mito, el cuento, la fábula, el sermón, la exhortación, la confesión de fe, la narración didáctica, la parábola, la sentencia profética, jurídica o sapiencial, el refrán, el discurso, la oración, el canto, etc. La lista podría alargarse y dividirse aun más.
En la Biblia, como en todo escrito, se habla a veces en lenguaje figurado, con sus metáforas, sinécdoques, metonimias y antropomorfismos. Dice, por ejemplo, que la luna se avergüenza y que las estrellas se alegran; que Dios duerme y se levanta; que cubre al fiel con sus alas. Sería equivocado entenderlo como suena o imaginarse que el cielo tiene puertas con San Pedro de portero porque el Señor dijo que le daba sus llaves. Las figuras hay que tomarlas como figuras, y no como realidades tal como suenan.
También sería equivocado tomar como suenan las exageraciones frecuentes en la Biblia. En aquel tiempo todos entendían que había que rebajar las cifras cuando se hablaba de los combatientes en una batalla o de las riquezas del templo o del rey. La exageración era un modo de realzar el relato y dar a entender la importancia de la cosa. ¡Nosotros ahora también sabemos exagerar con ese fin!
También son figuras, que no deben tomarse al pie de la letra, las paradojas, como aquella de que “el que no odia a su padre y a su madre, no es digno de mi” (Lc 14,26).
Los autores de la Biblia, hijos de su tiempo, se expresan según la mentalidad y la ciencia de su época: Por eso dicen que la tierra está fija y es el sol el que se mueve, o que la luna es más grande que las estrellas. En conformidad con la visión religiosa y la ciencia de su tiempo, atribuyen muchas enfermedades al demonio. Frecuentemente se saltan las causas segundas, atribuyendo a Dios directamente todo lo que pasa.
En la Biblia hay a veces narraciones folklóricas, con sus típicas exageraciones y formas épicas populares, cuyo objeto es dar importancia a la figura de los héroes y las gestas del pueblo. Tales parecen ser la historia de Sansón (Jue 13), la de las pieles que Rebeca puso a Jacob (Gén 27) o la forma como se describen las plagas de Egipto (Ex 9). Esas formas son maneras de la narrativa popular, que se complace en dar colorido a los relatos y agrandan las cosas para impresionar.
A veces en la Biblia hay cábalas, es decir, lecciones en números, cosa muy del gusto de los orientales, aunque para nosotros sea algo desconocido. Un ejemplo claro es el de la edad de los patriarcas. Con esas cifras tan altas no se quiere determinar un número concreto de años vividos, sino darnos una lección en números sobre la perfección de los patriarcas. No se pueden tomar como nos suenan a nosotros muchos números de la Biblia. Hay que buscar su sentido simbólico, ya que con frecuencia significan cualidad y no cantidad. El 7, por ejemplo, significa totalidad, y el 12, perfección.
Ignorar los géneros literarios puede conducir a interpretaciones erróneas de la Escritura.
“En la historia de la Iglesia se encuentran muchos puntos oscuros e indecibles sufrimientos sólo por no haber tenido en cuenta la intención primaria de determinados géneros literarios y formas en la Biblia. Se han considerado históricos textos bíblicos que sólo pretendían hacer un anuncio. Se han interpretado como leyes textos neotestamentarios que pretendían aconsejar y exhortar. Y también: textos que contenían confesiones de fe se han tomado como informaciones”
(Lohfink).
A. http://www.telefonica.net/web2/eseducativa/biblia_generoliterario.html
B. http://www.guadalupe-ec.org/3_Bhaus/02_biblia/generos%20literarios.htm
C. http://www.mercaba.org/Caravias/biblia_fe_vida_02.htm
D. http://www.salesianos-sevilla.com/image/TEMA%203.pdf
E. http://www.salesianos-sevilla.com/image/TEMA%204.pdf
F. http://www.auladebiblia.com/introduccion/tema6/tema6.html
G. http://www.corazones.org/diccionario/generos_literarios.htm
H. http://www.rsanzcarrera2.wordpress.com/2010/03/21/los-generos-literarios-de-la-biblia
I. http://www.books.google.es/books?id=4vBUrUcBu2EC&pg=PA371&lpg=PA371&dq=Historia
J. http://www.jagove.blogspot.com/2006/06/curso-de-biblia-leccin-5.html
K. http://www.lasagradafamilia.org.ar/EspecialMesBiblia321.php
L. http://principioscatolicos.blogspot.com.es/2009/02/la-biblia-es-el-mayor-compendio-de.html
M. http://www.ladeliteratura.com.uy/sala/complementos/calvino.pdf
N. https://bibliaprendiendo.wordpress.com/2015/07/28/4-generos-literarios-en-la-biblia/comment-page-1/#comment-2
O. https://bibliaprendiendo.files.wordpress.com/2013/10/gc3a9neros-literarios.pdf